Falleció exmagistrado Oscar Fonseca Montoya
Fungió como magistrado electoral 13 años y presidió el TSE por 8 años
El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) lamenta el sensible fallecimiento del señor Oscar Fonseca Montoya, exmagistrado de este organismo electoral.
Fonseca Montoya ingresó a laborar al TSE como magistrado el 16 de julio de 1993 y tuvo la responsabilidad de participar en cuatro elecciones presidenciales (1994, 1998, 2002 y 2006, incluyendo la primera segunda ronda electoral de nuestra historia) y en dos comicios municipales (2002 y 2006).
En dos ocasiones fue reelecto como magistrado del TSE y a partir del 6 de abril de 1999 fue designado como su presidente. También participó como observador internacional en comicios realizados en Bolivia, El Salvador, República Dominicana, Guatemala, Brasil, Panamá, España, Venezuela, Ecuador, México, Argentina y Taiwán.
Junto a sus compañeros Magistrados del TSE, en el 2001 presentó ante la Asamblea Legislativa el proyecto de nuevo Código Electoral, iniciativa que fue aprobada en 2009. De igual forma, participó en la creación del recurso de amparo electoral e impulsó la modernización de la cédula de identidad. Además, integró el Tribunal que garantizó el cumplimiento a la cuota de participación política de las mujeres.
El exmagistrado Fonseca se acogió a su jubilación el 1° de marzo de 2007.
“Con sus aportes y esfuerzos, mostró la apertura y madurez necesarias para promover cambios modernizadores en la institución. Siempre proyectó una imagen de probidad, prudencia, sensatez y señorío, que sin duda será fuente de inspiración y respeto para quienes tuvimos la fortuna de trabajar con él”, señaló Luis Antonio Sobrado, magistrado presidente del TSE.
Fonseca tenía 79 años de edad, era abogado, notario y también se graduó como profesor de enseñanza primaria en la histórica Escuela Normal de Heredia. Trabajó durante 30 años en el Poder Judicial, donde ocupó diversos cargos. En 1975, al fundarse el Ministerio Público, formó parte del primer grupo de agentes fiscales y se desempeñó como subjefe de esa dependencia en 1981. Tuvo una amplia trayectoria como juez penal, que coronó en 1991 con la “Medalla de Oro al Buen Juez”, premio que otorga la Corte Suprema de Justicia a funcionarios distinguidos que administran justicia. También fue profesor de Derecho Penal en la Universidad de Costa Rica y en la Universidad Autónoma de Centroamérica.